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El nuevo proyecto empresarial de Victoria Beckham aleja a la diseñadora de las pasarelas

Victoria Beckham da un salto en el mundo de la belleza y presenta su nueva apuesta empresarial, su primera colección de brochas de maquillaje.

Foto: @victoriabeckham
Foto: @victoriabeckham

Victoria Beckham (50 años, Harlow, Reino Unido) no solo es un referente en la moda y la belleza, sino también una hábil estratega empresarial. Con su nueva colección de brochas de maquillaje, la ex Spice Girl refuerza su posición en el mundo de la belleza, un sector global que mueve más de 570 mil millones de dólares anualmente.

Desde el lanzamiento de Victoria Beckham Beauty en 2019, Beckham ha estado introduciendo productos de maquillaje innovadores. Ahora, da un paso más natural y personal con una colección de nueve brochas inspiradas en la caligrafía. “Para mí, todo se reduce a la consideración, la ejecución y la precisión”, afirma Beckham. “He pasado años trabajando con los mejores profesionales de la industria, aprendiendo muchos trucos y consejos. Pero al final, creo en lo que deseo y lo que no encuentro en ningún otro lugar. Mi objetivo siempre es el producto, y no me conformo hasta que sea el mejor”.

9 brochas y ninguna sobra

La colección Victoria Beckham Beauty incluye nueve brochas: brocha para corrector y detalle, brocha pulidora, brocha para esculpir, brocha abanico, brocha para polvos, brocha suave para difuminar, brocha para difuminar, brocha para definir y delinear, y brocha para labios. Beckham subraya: “Cada brocha tiene un propósito; nada sobra. Quería crear una selección precisa y bien pensada donde cada brocha tuviera un lugar. Se trata de centrarme en la función, asegurándome de que cada una realzara realmente el proceso de aplicación”.

La nueva colección de brochas de maquillaje de Victoria Beckham Beauty

La pasión de Beckham por la caligrafía ha sido fundamental en la creación de estas brochas, así como en sus otros productos, como los cubiertos de la marca. “Arte siempre fue mi materia favorita en la escuela”, revela Beckham. “Se trata de precisión y maestría, que es exactamente lo que quería transmitir a estos pinceles. Las curvas, la forma y el movimiento de una pluma caligráfica fueron una gran fuente de inspiración”.

Para asegurar la máxima funcionalidad, Beckham también se enfocó en la ergonomía. “Los mangos de madera tienen hendiduras y protuberancias que se adaptan perfectamente a la mano. Quería que las brochas fueran fáciles de usar: cómodas de sostener, perfectamente equilibradas y diseñadas para una aplicación fluida”.

El pincel definidor y delineador Victoria Beckham Beauty

La brocha abanico, de sus favoritas

Uno de los elementos destacados de la colección es la brocha abanico con puntas rubias. Beckham comenta: “Me parece preciosa. Cada detalle ha sido cuidadosamente pensado, y las puntas rubias le dan un toque especial. Son esos pequeños detalles los que hacen que algo se sienta único. Quiero inspirar a mis clientas no solo con el rendimiento de las brochas, sino también con su aspecto y tacto”.

La brocha abanico es una de sus favoritas debido a su firmeza. “Es más firme que la mayoría. Mi truco es usarla con el bronceador. Muchas brochas de abanico pueden ser demasiado suaves, pero quería que esta tuviera la estructura necesaria para difuminar a la perfección, creando un look suave y esculpido”, explica.

El cepillo de abanico de belleza de Victoria Beckham

Seleccionar la madera adecuada también fue crucial. “Siempre me inspiro en mi entorno: mi casa y los interiores que diseño. La madera de nogal fue la opción perfecta. Soy muy exigente con el diseño, y eso se refleja en todo lo que creo. Nada se elige al azar; siempre hay una razón detrás de cada elemento”.

Beckham disfrutó aprendiendo sobre las brochas durante el proceso de creación. “Siempre he apreciado una brocha bien hecha, pero pasar por el proceso de diseño realmente profundizó mi comprensión de la artesanía. Cada pequeño detalle, desde la forma de las cerdas hasta el peso del mango, cambia por completo el rendimiento de una brocha”, comenta.

Para ella, uno de los momentos más emocionantes fue ver los primeros prototipos. “Tenía una visión clara de lo que quería, pero al sostenerlas por primera vez, sentir su peso y probar las cerdas, lo supe de inmediato. Fue un proceso de perfeccionamiento, ajustando cada pequeño detalle hasta que quedó perfecto”.

«Mi compromiso con la calidad implicó varias rondas de revisión, porque cuando se trata de artesanía, no me conformo”, concluye Beckham

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